En muchas ocasiones, necesitamos formatear nuestro equipo, o simplemente llevarlo con nosotros vayamos donde vayamos, con lo que he pensado, que un tutorial de como “virtualizar nuestro equipo”, de tal forma, que podamos luego utilizarlo como una máquina virtual y así poder llevarlo siempre con nosotros.
Para conseguir nuestro propósito, contaremos con la ayuda de la aplicación “VmWare vCenter Converter Standalone”, que podemos conseguir de forma gratuita de los servidores de VmWare.
Una vez instalada, la ejecutamos.
Como podemos observar, no tenemos ningún “plan de migración” creado, así que vamos con ello.
Hacemos clic en “Convert machine”.
En este punto, marcamos en “select source type”: powered-on machine, y “this local machine” para que nos realice la virtualización de la máquina que estamos utilizando actualmente.
Ahora, en “select destination type”, le diremos en que formato de salida queremos tener nuestro SO, por tanto, vamos a marcar la opción “Vmware Workstation or other Vmware virtual machine”, y en select VMware product: Vmware Workstation (8.0) ((( aunque puedes optar por Vmware Fusion, Server, o Workstation en versiones anteriores…)
Como nota informativa, os recuerdo, que si creáis una imagen para Vmware Workstation 8.0, no podréis abrirla en versiones anteriores, así que ojo con este paso 😉
En “Name” , ponemos el nombre con el que guardaremos la futura máquina virtual y en “select a location for the virtual machine”, seleecionaremos donde guardar la máquina virtual.
Ahora bien, el destino de la máquina virtual, debe de ser una unidad ajena al PC, para evitar problemas futuros, como por ejemplo un USB externo, o un HDD pero ajeno siempre al sistema operativo. Nosotros vamos a usar una unidad de red donde exportar la imagen.
Al hacer clic, pasamos a la pestaña de “opciones”, donde podemos seleccionar diversos parámetros que contendrá nuestro equipo virtualizado inicialmente, aunque, como toda virtualización, podemos modificar estos valores nuevamente a la hora de abrir la imagen en Vmware Workstation.
Si algún parámetro requiere de nuestra atención nos lo indicará con algún icono en forma de atención . como el siguiente:
Como es lógico, un parámetro a “retocar” es el de la memoria, ya que actualmente utiliza toda la memoria física del equipo, ( 4GB en mi caso) y, nos indica, que la imagen, inicialmente, requerirá 4 GB para iniciarse.
La ajustamos bajando el valor de la memoria a por ejemplo 1024Mb.
Ahora le damos a “Next” revisamos los parámetros finales, y al hacer clic en “Finish” nuestra virtualización dará comienzo…
El tiempo que tarda la aplicación en “convertir” nuestro equipo en virtual, dependerá de varios factores como es lógico, tales como procesador, memoria, el espacio que tengas ocupado… etc…
Una vez tengamos la imagen en formato Vmware, solo deberemos “abrir” o “importar” desde Vmware WorkStation o Vmware Player, y a disfrutar 😉