Sony, aprieta, y aprieta fuerte, desde luego, lógico visto desde el punto de vista de una empresa lider del sector de los videojuegos entre otras.
Desde la publicación de material como PS Jailbreak, y otros dispositivos capaces de realizar un BUG en el arranque de la consola y el acceso en un “apartado” con posiblidades de instalación de aplicaciones de terceros, levantó verdaderas ampollas en Sony.
Ahora, que el tema, está más avanzado, ellos tambíen avanzan, pero a nivel judicial, en un intento desesperado de frenar lo que se avecina, y su considerable pérdida de futuros ingresos.
Sony solicitó a los juzgados la obligación por parte de GOOGLE de facilitar las direcciones IP de TODAS las personas que realizaron comentarios acerca del video “acerca de la fuga de la carcel de la PS3”. Así como a Twitter, que haga entrega de la propiedad intelectual de los participantes del desbloqueo de la consola.
Y por supuesto, tienen como intención DENUNCIAR a todos los que ofrezcan las herramientas necesarias para la liberación de la consola.